Aspectos


Arte Rupestre

En Uruguay

    ASPECTOS ESPECIFICOS DEL ARTE RUPESTRE

    LOS GRABADOS

    Los grabados se iniciaron entre los 6 a 8 mil años antes del presente, en un medioambiente muy distinto al actual. Por ello podemos ver como guanacos (hoy desaparecidos) y felinos emergen en grandes bloques horizontales, junto a sencillos dibujos geométricos. Miles de años más tarde, en las mismas áreas, se graban intrincadas figuras meándricas, junto a marcas de líneas paralelas y puntos agrupados.

    Hace unos dos mil años se vuelve a grabar. Ahora los diseños se complejizan porque se reutilizan no sólo los sitios, sino también los mismos bloques anteriormente grabados. Esto obliga a los investigadores a complejos trabajos técnicos para recuperar la información.

    Por último hace unos mil doscientos años, surge un estilo de diseños esquemáticos tanto antropomorfos como zoomorfos, junto a una técnica de grabado profundo y a veces alisado. Algunos de esos sitios reciben ofrendas con carácter ritual.

    LAS PINTURAS

    Las pinturas están realizadas en las paredes verticales de enormes bloques de granito, que emergen como grandes monumentos en las amplias praderas onduladas del sur del Uruguay.

    Se conservan aún hoy unas cuarenta de estos sitios con un grado de percepción visual aceptable. Mientras que en cerca de cien bloques, apenas se ven los restos de los que fueran importantes murales pintados. Algunas áreas de los departamentos de Flores, Florida, Colonia, Maldonado Durazno habían tenido una verdadera abundancia de expresiones rupestre y debieron ser en esa época, verdaderas exposiciones al aire libre.

    Como mínimo se comenzó a pintar hace unos dos mil quinientos años antes del presente. Hubo un período posterior alrededor del año 1.200 D.C., donde se vuelve a pintar, sobe la misma base estilística de figuras geométricas. Pero ahora se utilizan complejas formas cerradas, con importante variación de los diseños internos.

    También en ese período se ensayan varias técnicas diferentes como el uso de pinceles finos (2 a 3 mms.), la preparación de la superficie previa al diseño, impresiones de manos adultas e infantiles en positivo e incluso pintura en negativo. Hay un especial cuidado en no sobreponer las pinturas, cuidándose el uso del espacio, como una referencia muy valiosa.